Tegucigalpa, Honduras 25 de abril de Honduras.- Estaba almorzándome
un excepcional y bien condimentado artículo de BBC Mundo, dice sobre
Latinoamérica, “Piropos abuso o expresión cultural? Está genial el artículo y como yo tomo a los Garífunas como
el centro del universo a partir de los cuales explico todos mis pensamientos
sobre el acontecer mundial, no he dejado de relacionar este artículo con el
pueblo garífuna.
Siempre he pensado, salvo mejor
criterio, que los piropos no existen en la cultura garífuna. Una razón por la
cual, para mí es un orgullo garífuna. Los piropos son una forma rara de
expresión a lo que estoy poco habituado. No los utilizaría yo con una mujer para ligar.
Dios me dotó de dos buenos ojos, pero no me encuentro entre los piroperos. Ni
siquiera estoy cerca de ellos. Aunque a mis amigas gusto de molestarlas con “Si así
fuera la muerte me tiraría de cabeza” o “aquí vivís sin pagar renta”.
A mis amigas siempre les preguntó
¿Cuál es el piropo más estúpido que te han recetado? una de ellas me confesó, “estas
como pescado frito en aceite” a otra le dijeron que “rico tu vestido”, esta
última contesto “te lo presto”.
De regreso a la comunidad
Garífuna es interesante la forma cultural de ligar, esa plática empieza
respetuosamente y con ceremonial precedido de la palabra “Nitu” (hermana menor)
y si le preguntas por su madre te referirás a ella como tía o tío si es por el
padre; abuelo si es por el abuelo y así sucesivamente. Esta tradición cultural
no tiene precio y por ende la pongo en la lista de razones para ser un
orgulloso garífuna.
Entonces, hay razón en aquellos
que señalan que los garífunas somos parientes.
Esa hermandad es la que nos ha salvado del desastre, en la era de las
violaciones sexuales, asaltos, crimen organizado, feminicidios y tantos otros crímenes
que caracterizan nuestra época. En un tiempo, dos mujeres de un mismo varón, no
se peleaban, se guardaban respeto.
Los garífunas tenemos respeto por
la vida. Somos alegres, nos reímos pomposamente. Hospitalarios, siempre me ha
llamado la atención que en una comunidad ladina-mestiza de entrada te dicen
negro, negrito; en la comunidad garífuna a los ladinos-mestizo se les dice “amigo,
amiga”.
Nos caracteriza la bondad y tenemos un gran sentido de lo que
significa familia.
Todas estas tradiciones culturales
son muros de contención que protegen a la sociedad garífuna y que a medida que
las perdemos, nos perdemos. Más que leyes, la sociedad necesita valores y principios
y en eso somos ricos los garífunas, otra razón para ser orgulloso garífuna.