Como me conocen por mi afición al fútbol dirán que lo primordial para
mí en el 2013 es que Honduras clasifique al Mundial de Brasil 2014, de hecho
así lo espero, no obstante son varias la tribulaciones que tiene el país en
razón de saldar las cuentas que por largos años se vienen manteniendo. Lo primero
en la agenda es la elección presidencial apartada para el último domingo de
noviembre.
La finalización
del año no ha sido muy grata para nuestro país; con las arcas del gobierno vacías
con problemas para dar el aguinaldo miles de sus empleados; la separación de los magistrados, la
inseguridad ciudadana y finalmente el impresentable suceso de la Embajada de
Honduras en Colombia donde un empleado desarrollo una fiesta con prostitutas
que dejaron un desastre, llegando incluso a defecar en el propio escritorio del
Embajador.
Nos aprestamos a
escoger, este año, un nuevo presidente o presidenta que dirigirá el país dentro
de los siguientes cuatro años. Esa competencia entre Xiomara Castro de Zelaya del
Partido Libertad y Refundación (izquierda); Juan Orlando Hernández
del Partido Nacional; Mauricio Villeda del Partido Liberal;
Andrés Pavón del
recién creado Partido Frente Político Electoral en Resistencia (FAPER); Salvador
Nasralla del Partido Anticorrupción (PAC), Romeo Vásquez por
la Alianza Patriótica Hondureña (extrema derecha), Lucas Aguilera de
la Democracia Cristiana, mientras que Unificación Democrática y el Partido de
Innovación y Unidad no han designado todavía al suyo.
Sin dudar, será el evento del año y a estas alturas ya la
gran pregunta es ¿Quién será el próximo o la próxima presidenta de Honduras? Ya
los que viven de las políticas hacen sus quinielas. Los pronósticos son varios
y hoy por primera vez en la historia, una mujer tiene gran posibilidad de
convertirse en mandataria. Honduras seguiría así una larga lista de países
latinoamericanos que han tomado esa ruta, como Chile con Michelle Bachelet, Argentina
con Cristina Kirchner, Costa Rica con Laura Chinchilla; Nicaragua hace unos años se decidió por Violeta Barios
de Chamorro.
Ni siquiera Estados
Unidos, la democracia más fuerte ha tenido una Presidenta.
Si algo quisiera
para Honduras sería la creación de empleos. Necesitamos revertir las cifras del
desempleo. En mayo del año anterior, el índice de desempleo en Honduras era de
49 por ciento, un país prácticamente parado. Con una criminalidad muy fuerte. Creo que la
generación de empleo es la clave para parar la violencia.
A la par de
aquello, habrá que llevar una política de seguridad; poniendo a trabajar como
se debe a la Policía, permeando a los
organismos que imparten justicia. También lograr la eficiencia y
eficacia de la administración pública. El hondureño por su parte debe ser
disciplinado, proactivo y creativo.
Finalmente la clasificación
a la Copa Mundial de Brasil 2014.
En caso que todo
aquello falle, llegar al Mundial sería muy elemental para curar la insatisfacción
popular hondureña. Como dijera Valdano, de las cosas menos importantes el fútbol
es lo más importante. Dios bendiga nuestro país.