sábado, 13 de abril de 2013

El gran reto garífuna



Posiblemente la causa principal  para ser pobre es no tener tierra y a nosotros los garífunas hace 216 años nos sacaron de nuestra tierra, de San Vicente, en las Antillas Menores. Llegamos  a Honduras sin nada. No era un viaje de turismo, éramos desplazados, desterrados. No obstante pasados este tiempo, la realidad ha cambiado, los garífunas somos una comunidad de propósitos y con ello hemos mejorado hasta llegar a ser uno de los sectores más pujantes del país.

Los garífunas tenemos presencia en política, literatura, arte, economía, ciencia, deporte, educación, medicina, Seguridad. De  ser una comunidad de pescadores, hoy estamos insertos en todas las actividades económicas de nuestro país y lo mejor es que sin apoyo del Gobierno o, para ser justos, digamos que con poca o mínima asistencia del Estado.

Hemos sido víctimas de una marginación sistemática. Nuestras carreteras son malas, tenemos centros de salud deficientes, escuelas de lo peor. No han existido políticas de protección y promoción. En el tema de la tierra el Gobierno ha contemplado y casi patrocinado despojos de nuestros territorios. Se han quedado observando los crímenes en nuestra contra en el proceso de la defensa de tierra. La situación de empleo para nuestros hermanos y hermanas ha sido lo peor y un sinfín de situaciones, aún así nos levantamos y vamos adelante.

No pretendo rendir culto a la violencia, soy un hombre de paz, pero el Gobierno, nos ha dado un tiro en el pie, caminamos, con dificultad, pero caminamo y vamos bien
 
Sin embargo aún queda mucho por hacer. La lista es grande, pero pretendo quedarme en una sola y englobar ahí varias vertientes de lucha: nuestra meta debe estar centrada en derrotar la pobreza. 

Declaro mi desprecio por la pobreza, no me siento satisfecho que hayan pobres y especialmente si son mis hermanos y hermanas. Ya no soporto tanto niño malnutrido. 

Existe pobreza mental y pobreza económica, no importa debemos derrotar las dos y todas las pobrezas que vengan después.

En pleno Siglo XXI debemos conseguir que a todos nos indigne la pobreza. Debemos sentir rechazo por la inequidad; actuar y pensar en que sí podemos salir adelante, todos. La naturaleza da para todos y en esa ruta debemos pensar y dar ejemplo al mundo que nosotros sí podemos derrotar a la pobreza.

Algunos pensarán que es imposible, pero sí lo hemos logrado. Nosotros hemos derrotado la pobreza. Vuelvo al principio, de San Vicente veníamos sin nada. Hoy debemos echar fuera de nuestra mente cualquier duda, cualquier complejo y solo ver al frente. Debemos permitir que los negocios garífunas sean prósperos, creando empleos, educándonos, poniendo a producir la tierra y sobre todo poniendo en vigor una constitución social con los valores y principios que nuestros padres nos dejaron.

No es fácil.