martes, 17 de junio de 2014

El lugar donde nacen los fondistas de Honduras



Tegucigalpa, Honduras 17 de junio de 2014.- Escondido tras las montañas del departamento de Intibucá, en el corazón de las cordilleras Puca o Palaca de la zona alta y en medio de los pinares se encuentra la aldea de Planes, Yamaranguila.  Distante unos 40 kilómetros de La Esperanza, este lugar goza de lo que pocos lugares en Honduras se pueden jactar y es su privilegiada temperatura. En diciembre llegan hasta 4 grados centígrados y la neblina les deja con pocos metros de visibilidad.


Una bella panoramica visible desde el centro de Planes

Durante las temporadas lluviosas es difícil entrar a Planes, la composición del terreno, hace imposibles las carreteras, aún para carros de doble tracción. Mucha gente se conduce a lomo de mula y cuando se va en carretera es muy común ver pobladores caminando y pidiendo aventón.

Durante nuestra visita a Planes, un perro dormía plácidamente enmedio de la carretera, por más que se le pitó nunca se levantó. Quizá le estorbaba la vida o prefería morir antes que despertar. Hubo que desviar el carro para evitar atentar contra la existencia del canino. Pasado el punto donde estaba, volteamos a ver y el perro seguía dormido, dentro del carro estallamos en risa. La actitud del perro nada tiene que ver con los pobladores que desde muy temprano salen de sus viviendas para ir a sus parcelas y se mantienen trabajando durante gran parte del día.

Planes, Yamaranguila, un sitio para conocer
En este lugar no hay energía eléctrica. Escuché solo dos televisores en uno de los cuales vi el primer encuentro de la Copa Mundial 2014, Brasil y Croacia. Eso sí, cuando estaba sentado el dueño de casa me pidió 5 lempiras. Creo que es justo que cobre para comprar el combustible del generador que resuena desde el exterior de su casa.
 
Alas 7 y media de la noche, jóvenes viendo televisión, han pagado 5 lempiras para ver una novela
 ¿El teléfono celular? emite sólo desde algunos puntos específicos. 

Las casas todas son de adobe (bloque de tierra), la mayor parte son viejas. Pisos de tierra y las paredes están invadidas por el humo adherido con el paso del tiempo. Para protegerse del frío las ventanas son pequeñas. En el interior de las viviendas es oscuro y tiene un ambiente lúgubre como sacado de algunas películas. No falta el molino de maíz y tampoco el fogón prendido durante todo el día.

En lo que sí son millonarios los habitantes de Planes es en recursos naturales; tienen preciosos bosques y tierra fértil. Gozan de un oxigeno sabroso. También son ricos en calidad humana; la gente es muy educada y civilizada. Tienen gran sentido de hospitalidad, siempre saludan. Sonríen, no hablan alto y tienen cortesía.

En Planes se cultiva el durazno, el melocotón, frijol, maíz, pero el producto rey es la Papa, también liquidambar. Cada casa está rodeada de preciosos sembradíos.

Bernardo Lemus
La aldea es pequeña, apenas unas 40 casas. Es aquí donde nacen los mejores velocistas de Honduras, como Bernardo Lemus de 18 añitos. En apenas 9 meses de entrenamiento corre 30 kilómetros en 1 hora 6 minutos;  10 kilómetros los hace en 34 minutos y 8 km en 30 minutos. Ya le pisa los talones al mejor de Honduras, Rodrigo Bautista de 30 años, en la última competencia Rodrigo ganó por 4 minutos, si bien en el ámbito deportivo esto es mucho hay que relacionar el tiempo entrenado por ambos atletas. 

Platicamos con Bernardo Lemus y nos sorprendió su escasa estatura y su aparente débil complexión. También está  José Joel Méndez de quien no sabemos mucho, pero tiene el respeto de Bernardo. En total hay 8 fondistas en Planes, todos son promesas para el país. He aquí una oportunidad para Honduras, para ser potencia en algo.

El éxito logrado por estos grandes héroes ha estimulado a niños y niñas. En el pueblo hay un ambiente de motivación por el atletismo; los adultos se refieren con mucho orgullo a sus héroes.                                A cualquier hora del día, pero especialmente en la mañana se les ve corriendo a los marathonistas y lo hacen solos. No tienen entrenadores, tampoco están federados.


Niñas que ya pratican atletismo

El secreto de la gran resistencia de estos campeones y campeonas es la altura de su comunidad, se encuentra más arriba que La Esperanza, la ciudad más alta de Honduras. Los aldeanos hablan de 1 mil 900 metros sobre el nivel del mar. Esto les da la oxigenación que les permite tener el doble o triple de la resistencia que una persona que vive a nivel del mar.

Un detalle no menor es que estos héroes pertenecen al pueblo Lenca. De modo que si la comunidad garífuna es reconocida por sus futbolistas y velocistas, a los lencas hay que reconocerlos por la enorme resistencia física que los convierte en los mejores fondistas.

Estos atletas ponen la mirada en lo más alto. Tienen grandes sueños. Quizá no tardado la bandera de Honduras empiece a flamear a escala planetaria. Tal y como lo hace Jamaica con sus velocistas. No es exagerado decirlo si se cuenta con el apoyo, pero por ahora no es así. En Planes ni siquiera hay centro de salud y es el lugar donde nacen los mejores fondistas de Honduras.  


 
Una imagen muy tipica en Planes. Foto de Alex González
Nota
A Planes no fui por casualidad. Llegué como periodista a cubrir una Feria Integral de la Salud preparada por la Dirección de Pueblos Indígenas y Afrohondureños y la Universidad Nacional Autónoma de Honduras, insisto, ni siquiera hay centro de salud. Eso sí espero volver en diciembre para disfrutar del clima delicioso.