sábado, 20 de marzo de 2010

¿Por qué el Embajador de Estados Unidos busca reparar la democracia hondureña?


En los ultimos días hay una campaña del Embajador de Estados Unidos en Honduras, aparentemente con el fin de restaurar la democracia, pero esa buena intención sólo él se la cree.

No me sorprende que Estados Unidos ande promoviendo como locos el retorno de Honduras a las Organización de Estados Americanos (OEA), tras haber violado la carta democrática con el golpe de estado. No me sorprende que ellos anden ahora ofreciendo el cielo y la tierra en las diferentes carteras ministeriales del gobierno. No me sorprende, ya lo esperaba. Ello confirma su vinculación al golpe, lo que era un secreto a voces.
Foto Hugo Llorens(La Tribuna)

Hugo Llorens, Embajador de EUA en Honduras, ha estado visitando todos los ministerios de Honduras, prometiendo apoyo de todos lados. Su campaña a favor de Honduras llega a tal extremo que, parece ya, un hombre desesperado y no un embajador cualquiera y menos de la primera potencia mundial. No obstante su obstinación hasta ahora, no ha logrado que el mundo olvide los tristes sucesos del 28 de junio.

El mundo llama al pan, pan y al golpe, golpe. Solo Estados Unidos dependiendo de las cosas llama al golpe, pan o viceversa dependiendo de sus intereses.

Que el Llorens ande por doquier, no es un indicativo de que está preocupado por el futuro de Honduras, sino que anda sanando las heridas que ellos mismo produjeron, mientras tanto en las calles se repite constantemente que en Estados Unidos no podría haber un golpe de Estados porque, sencillamente, no hay una Embajada estadounidense, realmente que el juicio popular es lapidario.

El panorama político de Honduras se complica complicada cada día, la división es aumenta. Ninguna de las determinaciones del Presidente Porfirio Lobo goza de respaldo popular, cada decisión lo pone del lado golpista o de lado de la resistencia. Se arma así un caldo maravilloso para la ingobernabilidad, una ingobernabilidad que se traduce en tensos debates en los medios de comunicación. Esto, más el crimen, el desempleo y todo los problemas tradicionales de Honduras, vuelve al país en una bomba de tiempo.

La ultima de la decisión de Lobo ha sido la de permitir el ingreso de Manuel Zelaya. Esto que pareciera una simple cosa, tiene a los hondureños enfrentados. Lobo al parecer se comprometió con Hilary Clinton a no dar persecución a Zelaya. Otro eslabón más en la larga cadena de datos que evidencia a Estados Unidos como el golpista mayor.

El poderoso liderazgo acumulado por Zelaya es una arma de doble filo, pero al final de cuentas, el único perdedor será Honduras y los hondureños, quedaremos peleando entre nosotros, mientras Estados Unidos, autor del golpe por culpa de su estrategia geopolítica, queda bien con los dos bandos que ya prometen darse en la madre. Bien dicho Estados Unidos no tiene amigos, sólo intereses.